14 DE FEBRERO, PRIMER MOMENTO DEL AÑO EN EL QUE SE REGISTRA UNA RECUPERACIÓN ECONÓMICA
MÉXICO.- Violeta Rodríguez del Villar, académica del Instituto de Investigaciones Económicas(IIEc) de la UNAM, indicó que somos una sociedad que confiere mayor significado al hecho de regalar, que a demostrar afectos como el amor y amistad. “Estamos muy condicionados a expresar nuestras emociones mediante los bienes materiales, lo que lleva precisamente al incremento de las ventas”.
La universitaria recordó que en 2018 la recuperación económica en el día de los enamorados fue de 20 mil millones de pesos, cifra que fue mayor a la de 2017. Para este año se espera que sea similar; esta cifra es considerable, pero sólo transitoria, pues se trata de una mejoría fugaz, remarcó.
Al igual que sucede en diciembre, el consumo alrededor del 14 de febrero tiene un componente emocional importante, que evita que las personas evalúen correctamente sus compras; “por lo general el gasto excede la capacidad de pago, característica del consumo emocional”.
El incremento del endeudamiento inicia en diciembre y llega a su pico en la cuesta de enero, que es cuando se tiene mayor déficit con respecto al ingreso; así, la gente llega a febrero sin haber saneado sus finanzas, y el 14 tiende a incrementar sus deudas.
El Día de San Valentín ya no es una celebración del amor y amistad, sino de consumismo, impulsado por la mercadotecnia. El festejo del 14 de febrero es el primer momento del año en el que se registra una recuperación económica, de aproximadamente tres por ciento, pero es efímera y los beneficios no son generalizados ni suficientes para compensar la cuesta de enero.
Rodríguez del Villar subrayó la necesidad de valorar el crecimiento económico derivado de esta celebración, pues aunque representa un movimiento importante para las finanzas mexicanas, en particular de los sectores de servicios y comercio, “no significa que se sostenga y haya una recuperación posterior. Es sólo durante este periodo y se acabó, de inmediato baja”.
Esta fecha podría implicar un efecto similar al de las fiestas decembrinas: una cuesta, pero del Día de San Valentín, pues las personas piensan en satisfacer a sus seres queridos con obsequios y olvidan su capacidad de pago; “luego se enfrentan a problemas económicos para financiar tarjetas de crédito y saldar deudas”.