COLOSO VS COLOSIO @MARTHAGTZ #Domingueando en @elheraldo_mx

COLUMNA, NACIONAL, POLÍTICA

El Coloso para Marvel es un personaje de ficción, mutante, miembro de los hombres X, y con habilidades para transformar su cuerpo y convertirse en un gigante de acero

El Coloso para Marvel es un personaje de ficción, mutante, miembro de los hombres X, y con habilidades para transformar su cuerpo y convertirse en un gigante de acero dándole la posibilidad de adquirir una fuerza súper humana, alto rendimiento, poder y resistencia. Para los griegos significaba una estatua gigante que tenía como propósito magnificar las habilidades y poderes de los seres humanos imprimiendo temor y asombro a los visitantes y extraños.

Esto, es precisamente lo que se ha hecho con el apellido Colosio, a la muerte de Luis Donaldo. Nuestra tradicional cultura mexicana ha convertido el apellido Colosio en una marca, una especie de icono y esperanza de la justicia social, y cada día se viene creando un tipo de sustitución, añoranza o traslación de la esperanza claramente no cumplida de López Obrador.

Por eso, recientemente una casa encuestadora en un periódico de circulación nacional presentó con una alta aceptación a Luis Donaldo Colosio Riojas, como aspirante presidencial. Pero más allá de la mucha, poca o nula credibilidad de las encuestas o de los intereses que haya detrás, la realidad es que resulta necesario hablar directo del tema, antes de crear otro elefante blanco. Sobretodo, en términos de las premisas sociales que sustentan esa aspiración mexicana.

De ahí la envidia que derramó el Presidente Nacional del PRI, Alejandro Moreno, declarando contra el oportunismo de Dante Delgado de intentar manejar como marioneta al hijo de Luis Donaldo Colosio, y de los Basave padre e hijo, que parecen querer traerlo con correa para capitalizar económica o políticamente al hijo del Coloso, que circula ahora en Nuevo León y que tiende a convertirse en una figura nacional.

Por otra parte, el cambio de régimen y empoderamiento social que provocó Andrés Manuel López Obrador en 2018, nos indica hoy más que en ningún otro momento de este siglo, que lo que busca y anhela la población, es la esperanza de un proyecto de Nación que incorpore e involucre a todos los mexicanos, no únicamente a los resentidos como sucede con López Obrador, o a los privilegiados como sucedió anteriormente.

La sociedad, no está buscando un proyecto personal escondido en la confusión de la narrativa nacional bajo algún nombre llamativo o una falsa causa, eso ya lo tiene muy detectado e identificado. Lo que en realidad está buscando es la conducción y construcción de un proyecto que comprenda en parte lo que Andrés Manuel diagnosticó correctamente (corrupción, desigualdad, invisibilidad de ciertos derechos, etc.), pero que a diferencia de él, si tenga la capacidad de ejecución y transparencia en la construcción, sobretodo, sin el uso faccioso de AMLO en la renovación nacional.

Por ello, es muy importante que el joven Colosio comprenda y dimensione el Coloso que tiene frente a sí (no sólo a Andrés Manuel, sino a lo que representa el apellido de su padre), y que la mención en la citada encuesta no es producto de la eficacia o eficiencia de su incipiente carrera política, con la cual aún no ha podido demostrar visión, capacidad, conocimientos, o sensibilidad social. Porque lo cierto es que Colosio Riojas aún no ha brillado, pero tampoco la sociedad espera eso de él, precisamente porque la esperanza de tener un buen gobierno que le brinde seguridad y mejore su calidad de vida, ha opacado la realidad pura y dura. Desafortunadamente así ha ocurrido con la mayoría de las figuras estatales y nacionales.

TE PUEDE INTERESAR: ¡La clase media existe!

Esta conclusión es fundamental, porque el proyecto de Andrés Manuel López Obrador hacia el futuro ya es visible, y también, porque a una gran parte de la población no le parece correcto que ese proyecto sea personalísimo, por el contrario, está a la expectativa de algo mejor. Sin embargo si en el corto plazo este proyecto distinto no existe, es obvio predecir hacia donde votará.

Por ello, lo que el joven Colosio debe valorar ahora, es: si va a tener la estatura para enfrentar personalmente a Andrés Manuel López Obrador, si va a alcanzar a construir un proyecto que verdaderamente, sin generalidades, atienda las demandas políticas y sociales de cada región del país, y si va a dejarse manejar y manipular. O bien, si va a esperarse 6 años más, para darse tiempo de madurar y entender profundamente los valores que flotan en el país y que representan a la sociedad. Sobretodo, comprender qué tal vez su punto de crecimiento y madurez política no está en Nuevo León, sino en la Ciudad de México.

Con las condiciones que se presentan hoy, él es una de las mejores jugadas. Además, al mismo tiempo sería una oxigenación en todos los sentidos, nacional y local. Justo la prueba para demostrar si el Coloso es Colosio, o el Coloso es simplemente una estatua gigante ó un héroe de ficción.

Y no es pregunta

POR MARTHA GUTIÉRREZ
ANALISTA EN COMUNICACIÓN POLÍTICA
@MARTHAGTZ