DE FRENTE Y DE PERIL: RAMÓN ZURITA SAHAGÚN / A PRÉSTAMO EL MC @RevistaPersonae

No es la primera ocasión en que Dante Delgado cede la dirigencia nacional del partido que fundó hace 22 años y que ha sido tan rentable en los años recientes.

Pasó de ser Convergencia Democrática (CD) a simplemente Convergencia y transformarse en Movimiento Ciudadano (MC) y Dante siguió como dueño de la franquicia, hasta el pasado lunes en que cedió la dirigencia nacional a Clemente Castañeda y con ello al grupo del gobernador electo de Jalisco, Enrique Alfaro.

Dante ha mostrado su colmillo político desde que a los 37 años se convirtió en gobernador de Veracruz, en sus tiempos de priista, partido al que renunció en 1995 y construyó su propio frankestein político.

Jamás ha participado solo en una contienda presidencial, siempre aliado de otro partido más fuerte, que le garantice supervivencia y de esa manera logró tener a dos de sus alfiles en gobiernos estatales (Gabino Cué y ahora Alfaro) y una regular presencia en el Congreso de la Unión.

En un inicio tuvo solamente un senador, de acuerdo a los convenios establecidos con el partido ancla, el PRD, con el que fue aliado en cuatro proceso presidenciales y ahora disfruta su mejor momento con 28 diputados federales y siete senadores.

Dante ha sido el motor del partido, siendo candidato a gobernador de Veracruz en dos ocasiones en que fue derrotado y una más senador, ganando de mayoría, manteniendo el control del partido, cuya dirigencia nacional soltó alguna vez a Luis Maldonado (hoy Jefe de la Oficina del titular de la SEP).

Sin embargo, aunque coordina la bancada de senadores del MC, el detonante en que se convirtió Jalisco como plaza de su partido, pone a los seguidores de Enrique Alfaro como potenciales dueños de una franquicia que jamás ha querido soltar Dante y que hoy más que nunca muestra su rentabilidad.

PASARELA de gobernadores y alcaldes en San Lázaro en busca de mejores presupuestos para 2019. Cuántos lo conseguirán?

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