EL NEGOCIAZO DE LA BARBIE EMPODERADA QUE SE HA INVENTADO MARGOT ROBBIE
Nada menos que 12,5 millones de euros se ha embolsado la actriz del momento, alcanzando los cachés de Leo DiCaprio y Brad Pitt. Casada y sin hijos, también produce a sí misma.
En el valle de las muñecas, (1967) tres bellezas, Sharon Tate, Barbara Perkins y Patty Duke, aspiraban a conquistar la fama. En esa búsqueda quedan atrapadas en el lado oscuro al ser pasto de las drogas, la enfermedad y trabajos de baja estofa.
Éste es un sencillo ejemplo de que no siempre la cosificación de la mujer ha sido sinónimo de éxito. Sin embargo, cuando hablamos de Barbie, la historia deambuló por otros patíbulos. Cuando su creadora, Ruth Handler, sacó al mercado el juguete bautizado con el nombre de su hija no se podía imaginar que aquella muñeca de medidas prácticamente perfectas trascendería la Stargate para conquistar hogares hasta ese momento inalcanzables.
Mientras Hollywood se aboca al abismo por la huelga de actores y guionistas, Margot Robbie (33) está a punto de coronarse como la mujer más influyente de la industria. La intérprete se ha metido en la piel de Barbie en la película homónima recién estrenada en la que también ejerce como productora. A su lado, como no podía ser menos, su inseparable novio, Ken, con la beldad de Ryan Gosling (42).
La australiana se ha dejado querer. Ha jugado bien sus cartas. Los jefazos de la Warner Bros han estado varios años tras ella hasta que finalmente aceptó el proyecto. Según Variety, su caché ha sido de 12,5 millones de euros. Una cantidad irrisoria si tenemos en cuenta que recibirá un porcentaje por la recaudación en taquilla al ser una de las productoras y, por supuesto, otra comisión por el merchandising. Se han firmado un centenar de acuerdos, entre ellos, con Starbucks, Zara, Airbnb, Xbox e incluso Google se volvía rosa al hacer una búsqueda. En definitiva, le hará infinitamente más rica a pesar de tener ya una fortuna 40 millones de dólares. ¡Bienvenida la Robbiemanía.
El empoderamiento de la dos veces nominada al Oscar no ha hecho más que empezar. En cierto sentido, Time ya se lo olía cuando en 2017 la puso en la lista de las cien mujeres más influyentes del planeta. Extrovertida, intuitiva, optimista y con un carisma difícil de encontrar entre los rancios pilares hollywoodienses y el streaming más exacerbado, Margot Robbie saborea el universo rosa al más puro estilo Jayne Mansfield sin apenas despeinarse.
En este largo proceso de encarnar a la muñeca más icónica del siglo XX, la estrella ha contado con el apoyo incondicional de su marido, Tom Ackerley (33), a quien conoció siendo asistente del director en Suite francesa (2013), en la que ella era una de las protagonistas. La discreción ha sido la tónica para mantener una relación estable que ha evitado ser fagocitada por la vorágine de una industria obsesionada por derribar a ídolos con pies de barro. De momento, no tienen hijos.
Margot Robbie ha tenido la capacidad de albergar el poder contra la desigualdad de género y medirse frente a frente con los integrantes masculinos de la A-list como Tom Cruise (61), Brad Pitt (59) y Leonardo DiCaprio (48), con quien coprotagonizó El lobo de Wall Street (2013). Ese papel le encumbró a la fama. Pero le costó. La escena en la que se masturba durante unos segundos ante la mirada de su pareja (DiCaprio) duró diecisiete interminables horas rodeada por un equipo masculino de 30 personas.
JUBILADA
Con la inteligencia que otorga el no ser muy pagada de sí misma, Margot Robbie está encaminada a acortar la distancia en la brecha de género de una industria apolillada. Ese empoderamiento que se ha otorgado para sí no es más que una estrategia de liderazgo para fomentar una nueva perspectiva con la que analizar hacia dónde se dirige Hollywood.
De cara al 2023 Barbie se aproxima a la jubilación al cumplir 65 años, pero lejos de una retirada a tiempo, como suele decir Richard Dickson, presidente y director general de la multinacional juguetera Mattel, “Barbie no es sólo un juguete, es una fuente de inspiración”. Ahí están algunos de los roles que ha desarrollado para mantener su modus vivendi in pink que van desde haber sido astronauta a presidenta de los Estados Unidos.
Al año de nacer, Barbie ya era amiguita de 300.000 niñas y en 2021, según destacó en un artículo USA Today, se vendieron 84 millones de unidades, lo que se tradujo en 164 muñecas cada minuto.
Las cartas de la baraja ya se han echado. Y la manga viene ganadora. Los expertos auguran que la Barbiemanía podría pulverizar el récord de taquilla conseguido por Avatar: el sentido del agua (2022) que con un presupuesto de 350 millones de dólares obtuvo unos ingresos mundiales de algo más de 2.300 millones. Para recrear Barbie Land se han invertido 145 millones.