EL PRINCIPAL RETO DE LAS ENFERMERAS NO PERDER SU ATENCIÓN HUMANISTA : SS
CIUDAD DE MEXICO .- Con 27 años de servicio, en el Día de la Enfermera, Graciela Gómez Galindo no lo piensa mucho para señalar que el principal reto de las enfermeras no ha variado: atender con humanismo al paciente, y brindarle un trato cálido, sobre todo si es un enfermo pediátrico, quien más cariño requiere.
Sin embargo, de inmediato aclara que dicha atención debe ir acompañada de un permanente aprendizaje y actualización, para estar a la altura del desarrollo tecnológico en el campo de la medicina.
Por ello, agregaron Guillermina Sánchez González y Ariadna Berenice Rodríguez Olguín, en el Hospital Juárez de México puede confirmarse que el nivel de profesionalización de las más de 800 enfermeras se ha incrementado, la mayoría cuenta con licenciatura y muchas son especialistas.
“Yo empecé como técnica de Enfermería, pero la exigencia de la mejor atención nos ha motivado para tomar cursos de actualización”, dijo Graciela Gómez Galindo.
Asignadas al Servicio de Pediatría, en el cuarto piso de Hospitalización del HJM, junto a sus compañeras María Isabel Monjarás Mendoza, Daniela Medina Escobar y Samara Aranda Palacios, atienden a pacientes que van de los cuatro a los 16 años, de las especialidades de Nefrología, Cirugías Pediátricas, Medicina Interna e infectologìa.
Sin embargo, refieren que cada vez es mayor el número de niños enfermos de cáncer. Las salas de hospitalización están llenas con enfermos oncológicos que necesitan de una atención especializada, dijeron.
“Por eso, ser enfermera conlleva una gran responsabilidad, porque se trata de seres que apenas inician la vida, que necesitan de cuidados específicos, cariño y el mejor trato humano”, añadió Graciela Gómez Galindo.
Por su parte, Guillermina Sánchez González resaltó que la enfermería es la profesión más bendecida, porque requiere de mucha entrega. “Esto nos obliga a un mejor aprendizaje y a un crecimiento profesional”.
Ariadna Berenice Rodríguez Olguín afirmó que las enfermeras representan los pilares del hospital, porque han sabido adaptarse a los cambios que constantemente se dan en el tratamiento terapéutico, y esto resulta muy satisfactorio.
“Puede decirse que su campo profesional se ha ampliado, pero su misión sigue siendo esencialmente humanista en favor de los pacientes”, concluyeron las enfermeras del cuarto piso de Pediatría, que festejaron su día trabajando, como cualquier día normal.