EPILEPSIA, ENFERMEDAD QUE AFECTA A PERSONAS DE TODAS LAS EDADES
CIUDAD DE MÉXICO.- La epilepsia, enfermedad neurológica crónica que afecta a personas de todas las edades, es difícil de diagnosticar, sobre todo si no se tienen los elementos adecuados para ello.
“Una vez identificada, se debe intentar darle al paciente una mejor calidad de vida. No hace falta decir que alguien que sufre 30 convulsiones diarias lleva una vida bastante complicada; pero si es candidato a una cirugía, quizá podamos controlar su problema de salud”, afirmó Rosalinda Guevara Guzmán, coordinadora del Laboratorio Sensorial del Departamento de Fisiología de la Facultad de Medicina.
Las convulsiones que desencadena la epilepsia son causadas por descargas eléctricas anormales en ciertos grupos de neuronas. Llegan a ocurrir en diferentes partes del cerebro y pueden manifestarse como muy breves lapsos de ausencia, como contracciones musculares o convulsiones prolongadas y graves. Su frecuencia también puede variar desde una al año hasta varias al día.
Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), en el mundo habría unos 50 millones de personas con epilepsia y, en la población en general, la proporción de pacientes con epilepsia activa (con ataques continuos que necesitan tratamiento) sería de entre cuatro y 10 por cada mil habitantes. Sin embargo, de acuerdo con estudios realizados en países pobres o de ingresos bajos y medios, esta proporción sería de entre siete y 14 casos por cada mil habitantes.
La OMS sostiene que cada año se diagnostican unos 2.4 millones de casos, de los cuales habría, en las naciones ricas, entre 30 y 50 por cada cien mil habitantes, mientras que en los países pobres esta proporción podría ser el doble, debido, probablemente, a la fuerte presencia de males endémicos como neurocisticercosis y paludismo, a lesiones durante el parto, a la deficiente infraestructura médica y a la poca disponibilidad de programas de salud preventiva. Por lo anterior, casi 80 por ciento de los individuos con epilepsia vive en estas naciones.
Otro factor que podría contribuir a que el número de casos de epilepsia sea alto en los países pobres es la falta de especialistas. El Atlas de neurología 2017, de la OMS, señala que el promedio de neurólogos en esos territorios es de 0.1 por cada cien mil habitantes, mientras que en las naciones ricas es de 7.1.
Este padecimiento no es curable, añadió la científica. A pesar de ello, entre 60 y 70 por ciento de los casos se pueden controlar con los medicamentos disponibles. De esta manera, es posible llevar una vida normal, dependiendo del tipo de convulsión o de epilepsia que se padezca.
Es muy importante que la gente reciba tratamiento; sin embargo, en ocasiones, incluso con los fármacos no mejoran.
“Sí, cerca de 30 por ciento de los casos no responde a los medicamentos. Con una enfermedad tan persistente, los pacientes se vuelven resistentes a ellos y, por lo tanto, la hiperexcitabilidad del cerebro no disminuye. Entonces, la única solución es una cirugía, aunque no cualquiera es candidato a ella”, apuntó Guevara Guzmán.