ESCAÑO ABIERTO / LEGISLAR A LA MORENA @arturozamora #MartesDeColumnas

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ARTURO ZAMORA 2

A escasos 15 días de haberse iniciado la LXIV Legislatura del Congreso de la Unión, se perfila ya lo que será la agenda y el estilo de la bancada mayoritaria en ambas cámaras, su manera de entender el quehacer parlamentario y la forma en que concibe su relación con el futuro titular del Ejecutivo federal.

La evidencia brotó en la sesión de instalación, donde los congresistas de Morena, sus aliados y fuerzas obsecuentes se comportaron de manera estridente y antidemocrática ante los posicionamientos de la oposición.

El coro que entonaba la consigna de “es un honor estar con López Obrador” resumía lo que, probablemente, será el sello de su paso por el Congreso: La sumisión, incondicionalidad y cerrazón en un foro parlamentario que exige libertad, deliberación y apertura al debate informado y objetivo.

Vino luego el bochornoso altercado que protagonizó el diputado Gerardo Fernández Noroña al increpar al presidente del Congreso, el diputado Porfirio Muñoz Ledo, y obstinarse en tomar la tribuna para reclamar a los coordinadores de Morena el haber cumplido con un deber republicano.

En un episodio más de lo que será el espíritu legislativo de Morena, el senador Martí Batres presentó una iniciativa de reforma a la Ley del Agua que pretende, según su dicho, revertir el proceso de “privatización del agua” que, de progresar, dejaría sin agua potable y sistemas de saneamiento a millones que carecen de agua o la requerirán en el futuro.

Así, poniendo por delante la pretensión de garantizar el derecho humano al agua potable “suficiente, salubre, aceptable (sic) y asequible”, lo que ya establece la ley vigente, la iniciativa propone prohibir “la celebración de contratos con particulares, así como el otorgamiento de concesiones totales o parciales para operar, conservar, mantener, rehabilitar, modernizar o ampliar la infraestructura hidráulica”.

Batres desdeña que uno de los retos del Presidente electo es conseguir veinte pesos de inversión privada por cada peso que aplique el sector público en obras de infraestructura, pues entiende que el gobierno federal, en ningún país del mundo, jamás contará con los recursos suficientes para financiar todos los proyectos. Sin embargo, de aprobarse la iniciativa presentada, se tendrían que cancelar decenas de proyectos de abastecimiento y saneamiento, dejando sin atender el grave déficit de agua que padecen miles de centros de población urbana y rural.

Igualmente, tenemos el lamentable ejercicio de mayoriteo legislativo que reportó este diario con el titular “Morena prende la aplanadora”, donde se reseña el absurdo logro de Morena, el PT y PES al aprobar un punto de acuerdo que exhorta a las autoridades educativas a suspender las evaluaciones docentes, es decir, llamándolas a violar la ley vigente.

Con el grito de “¡va a caer, la reforma va a caer!” se inicia la embestida de los diputados morenistas de la CNTE, y avalada luego por sus senadores, para derogar una de las reformas más importantes para el desarrollo y futuro de nuestros niños y jóvenes.

Capítulo aparte merece la aprobación de una nueva Ley Federal de Remuneración de los Servidores Públicos, ejemplo de cerrazón, ligereza y descuido técnico-jurídico.

Con lo anterior, nada bueno traerá la cuarta transformación en la esfera del Poder Legislativo, el cual no se perfila como un contrapeso institucional efectivo, sino como un poder que ignorando a las minorías, el diálogo parlamentario y el consenso, será complaciente y sumiso a los mandatos de quien será el próximo presidente de la República.

                *Secretario general de la CNOP.

SE PUBLICA TODOS LOS MARTES EN EL DIARIO EXCÉLSIOR

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