ESCAÑO ABIERTO / PEF 2018: RECONSTRUCCIÓN, COMBATE A LA POBREZA, ESTABILIDAD Y AUSTERIDAD @arturozamora #MartesDeColumnas
En los siguientes días seremos testigos de la negociación en la Cámara de Diputados del Presupuesto de Egresos de la Federación 2018 (PEF). A pesar de las críticas de la oposición, cuatro virtudes caracterizan la proyección del gasto del gobierno federal en el próximo año: oportunidad, redistribución, estabilidad y austeridad.
En primer lugar, el énfasis en la reconstrucción es uno de los ejes de este presupuesto, ante la prioridad de atender la emergencia en varios estados del país como consecuencia de diversos fenómenos naturales. Esperamos que los partidos de oposición asuman la responsabilidad que aún no han tenido en este tema tan importante para la sociedad, pues la mayoría sólo se ha quedado en el discurso, a pesar de que es fundamental que en la negociación del PEF pasen de las palabras a los hechos y ayuden a fortalecer las estrategias del gobierno federal para la reconstrucción de viviendas e infraestructura básica.
El Presupuesto 2018 deberá tener un sentido humano, solidario y responsable. La administración pública federal ya ha hecho lo correspondiente al expresar al Congreso su plena disposición de ajustar las previsiones de gasto e inversión, tal como se hizo en emergencias anteriores. Falta ver si los partidos de oposición se deciden a actuar en favor de la ciudadanía y renuncian a los recursos públicos, que son de la gente, para destinarlos a la ayuda de los damnificados.
La segunda característica de este presupuesto es el énfasis en las estrategias de redistribución del ingreso regional y el combate a la pobreza. Si bien este gobierno ha generado tres millones de empleos en cinco años y la pobreza ha cedido (hoy 2.2 millones de mexicanos han superado la pobreza extrema), no debemos bajar la guardia, sino perseverar en estos esfuerzos.
El planteamiento de esta administración es continuar por la vía de la redistribución del ingreso con proyectos que reduzcan la desigualdad regional. Un ejemplo es la activación de las Zonas Económicas Especiales, las cuales recibirán más de 300 mil mdp en una estrategia integral de desarrollo que incluye las costas de Oaxaca y Chiapas.
En tercer lugar, el eje del Paquete Económico es la estabilidad, la cual se ha mantenido durante cinco años y es el principal promotor de la inversión y el desarrollo. Los datos son irrefutables: treinta trimestres consecutivos de crecimiento y una economía menos dependiente del petróleo y con una base de contribuyentes más amplia.
Como señaló el secretario de Hacienda, José Antonio Meade, los esfuerzos de reajuste financiero y reasignación presupuestal que se realicen en el PEF no deben comprometer los principios de disciplina financiera, control del déficit fiscal y la deuda; hacerlo sería arriesgar el rumbo de la economía y alejarse del propósito de mantener a raya la inflación en un momento que requiere certeza y confianza de los actores productivos.
Por último, el gobierno ha transitado de forma sistemática a esquemas de austeridad, disciplina y transparencia que están a la vista de todos. Hoy más que nunca, el gobierno está decidido a combatir la corrupción y la impunidad, porque este PEF prevé instrumentos inéditos de control, supervisión y fiscalización del gasto; por primera vez, el Fonden tendrá subcuentas abiertas a la intervención de la Auditoría Superior de la Federación, la Secretaría de la Función Pública y el Inai.
El PEF de 2018 es una muestra más de que a esta administración lo que le importa son los mexicanos y las bases de desarrollo del país.
*Secretario general de la CNOP.