EX PRESIDENTE CALDERON, GENARO GARCÍA LUNA Y EDUARDO MEDINA MORA DEBEN RENDIR CUENTAS ANTE LA JUSTICIA MEXICANA POR EL CASO “RÁPIDO Y FURIOSO”: @DoloresPL @DiputadosMorena @Mx_Diputados
PALACIO LEGISLATIVO DE SAN LÁZARO, CDMX, MX.- La Vicepresidenta de la Cámara de Diputados, Dolores Padierna Luna, afirmó que el ex presidente Felipe Calderón; el ex procurador General de la República,, Eduardo Medina Mora; y el entonces director de la Agencia Federal de Investigación (AFI), Genaro García Luna, actualmente preso en Estados Unidos, deben rendir cuentas ante la justicia mexicana por su presunta responsabilidad en el operativo “Rápido y Furioso”, por el que se introdujeron miles de armas a territorio mexicano y con las que se cometieron diversos delitos en ambos lados de la frontera.
Reveló que informes de la Agencia de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos de Estados Unidos (ATF), refieren que entre 2006 y 2010 miles de armas estadounidenses fueron introducidas a México de forma “legal”, como parte de un acuerdo entre las autoridades de ambas naciones para rastrear su destino final.
Padierna Luna sostuvo que cuando Eduardo Medina Mora fue procurador General de la República tuvo conocimiento, y esto lo dice la información de la ATF, de que Estados Unidos estaba desarrollando una estrategia denominada “dejar que caminen las armas”, que consistía en permitir su ingreso ilegal a México para después rastrearlas y ubicar así a los capos y células del narcotráfico.
“Ese fue el antecedente del fallido operativo Rápido y Furioso que conoció Eduardo Medina Mora. Los resultados han sido severamente cuestionados por las autoridades de Estados Unidos que abrieron diversas investigaciones en contra de quienes diseñaron y aplicaron dicho operativo, quienes recibieron severas sanciones. En nuestro país, en cambio, apenas y se han discutido sus implicaciones y sus consecuencias, no hay fincamiento de responsabilidades contra nadie”, apuntó.
La ATF, abundó la legisladora federal, reconoció que los operativos fallaron por la desorganización de las autoridades mexicanas, mientras que el Departamento de Justicia de Estados Unidos sostuvo que, en 2007, cuando el procurador General de la República era Eduardo Medina Mora, hizo de su conocimiento los avances de la operación encubierta, incluso se acordó que el personal de la AFI estaría las 24 horas en la frontera para rastrear esas armas.
“A este acuerdo llegó Medina Mora cuando fue procurador General de la República, y el responsable de la AFI, hasta el 2006, era Genaro García Luna, quien fue nombrado por Vicente Fox Quesada y luego se hizo cargo de la Secretaría de Seguridad Pública con Felipe Calderón”, recordó.
La Vicepresidenta de la Cámara de Diputados expuso que mientras Felipe Calderón siempre ha dicho que no tuvo conocimiento de esos programas, está documentado por el Gobierno estadounidense que desde el 2007 y hasta 2010 las autoridades mexicanas facilitaron el ingreso de armas al país, armas que agravaron la crisis de seguridad y derechos humanos en territorio nacional.
Agregó que, adicionalmente, hay una carpeta enorme de documentos desclasificados sobre el operativo “Rápido y Furioso” que fueron integrados por el Comité de Investigación del Congreso estadounidense, los cuales refieren el intercambio de información que hubo con autoridades mexicanas.
“Hay incluso un memorándum fechado en enero de 2008 donde se señala que la ATF llevó a cabo conversaciones con los más altos funcionarios del Gobierno de México respecto a la descentralización del proceso de rastreo de armas de fuego”, acotó.
Cuando Medina Mora se propuso para ser ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), agregó, se abrieron carpetas llenas de información que tienen en Estados Unidos. Al respecto, mencionó que hay un informe que data del 2010 de la Oficina de las Naciones Unidas Contra la Droga y el Delito, en el que se afirma que circulaba una gran cantidad de armas, suficientes como para armar al 30% de la población en México”.
Indicó que en el país se estima que hay 15 millones de armas circulando, de las cuales el 85% tiene una procedencia ilegal y el 70% de las armas decomisadas entre 2009 y 2010 llegaron de Estados Unidos.