EXIGEN JUSTICIA Y FRENO A FEMINICIDIOS

NACIONAL

CIUDAD DE MEXICO .- La marcha contra los feminicidios arribó al Zócalo capitalino para exigir a las autoridades que pongan un freno al asesinato de mujeres.

Familiares con fotografías de hijas, sobrinas, madres y nietas, en mantas y pancartas, que fueron asesinadas o se encuentran desaparecidas, acusaron una omisión de los gobiernos federal y estatales en los feminicidios, que van en ascenso en el País.

“Cada imagen que portamos es una historia de dolor, es una historia que tiene impunidad detrás, injusticia, y que no pararemos hasta lograr que los asesinos de estas mujeres estén tras las rejas”, reclamó Salvador San Pedro, padre de Victoria, asesinada en septiembre de 2017 por su novio.

Victoria, de 23 años, fue asesinada por su novio en un hotel.

El presunto asesino es identificado como Mario Sáenz, quien se encuentra prófugo mientras promueve amparo para evitar las órdenes de aprehensión en su contra.

“Vive uno con el dolor de la pérdida, de la muerte de mí hija, y encima tienes más dolor al saber que no se hace justicia, que los jueces no aceleran este proceso de justicia para tener a un feminicida tras las rejas”, lamentó don Salvador, asistente a la marcha.

Victoria fue maltratada antes de ser asesinada, reveló.

Durante el trayecto madres y padres de mujeres asesinadas portaron cruces con los nombres de las víctimas.

“Gobierno corrupto, por tu culpa estoy de luto”, gritaron, “vivas nos queremos, por eso marcharemos”.

Eduardo Salinas, hermano de Ana, otra joven asesinada por su ex novio en San Jerónimo Lídice, criticó que las autoridades no cuenten con programas de prevención para evitar los feminicidios.

“No es posible que este tipo de crímenes sigan y sea normal para las autoridades, los asesinatos de mujeres van en ascenso y nadie lo toma en cuenta, no hay castigos ejemplares”, manifestó.

La movilización, denominada “3 de Noviembre 1er día de Muertas”, culminó con pronunciamientos de diversos padres de familia en memoria de sus hijas asesinadas o desaparecidas.

“Ni una más, ya paren con este dolor”, expresó con lágrimas la señora Consuelo, madre de Victoria.

En la plancha del Zócalo dejaron flores y cruces, en memoria de las víctimas.

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