HOY MARÍA NOS SIGUE DICIENDO “HAGAN LO QUE JESÚS LES DIGA” : PAPA FRANCISCO
ROMA .- Durante el rezo del Ángelus este domingo 20 de enero en la Plaza de San Pedro del Vaticano, el Papa Francisco repasó el pasaje del Evangelio de San Juan en las bodas de Caná y recordó que hoy la Virgen María le sigue diciendo a la Iglesia: “Hagan lo que él les diga”.
“El domingo pasado, con la Fiesta del Bautismo del Señor, comenzamos el viaje del tiempo litúrgico llamado ‘ordinario’: el tiempo para seguir a Jesús en su vida pública y en la misión por la cual el Padre lo envió a este mundo”, recordó el Papa al inicio del Ángelus.
Asimismo, indicó que, en este pasaje evangélico situado en el pueblo de Caná, en Galilea, durante una fiesta de bodas, ocurre el primero de los milagros de Jesús
“Jesús se manifiesta como el cónyuge del pueblo de Dios, anunciado por los profetas, y nos revela la profundidad de la relación que nos une a él: es un nuevo pacto de amor”.
“En el contexto de la Alianza, el significado del símbolo del vino, que está en el centro de este milagro, se entiende completamente. Justo cuando la fiesta está en su apogeo, el vino se ha terminado; Nuestra Señora lo nota y le dice a Jesús: ‘No tienen vino’”, continúa el Papa.
Luego, el Papa advierte que Jesús “al convertir en vino el agua de la tinaja utilizada “para la purificación ritual de los judíos, Jesús hace un signo elocuente: transforma la Ley de Moisés en el Evangelio, portador de alegría”.
“Y luego, veamos a María: las palabras que María dirige a los sirvientes vienen a coronar el marco conyugal de Caná: ‘Lo que él te diga, hazlo’. Incluso hoy, Nuestra Señora nos dice a todos: ‘Hagan lo que él les diga’. Estas palabras son una herencia valiosa que nuestra Madre nos ha dejado”, explicó.
Finalmente, el Santo Padre profundizó en esta reflexión y animó a que cuando “el vino personal se nos termine”, busquemos a María.
“Jesús siempre nos sorprende. Hablamos con la Madre porque Ella habla con el Hijo, y Él nos sorprenderá. Que ella, la Santísima Virgen, nos ayude a seguir su invitación: ‘Hagan lo que él les diga’, para que podamos abrirnos completamente a Jesús, reconociendo en la vida cotidiana los signos de su presencia vivificadora”, concluyó.