LUIS HARVEY: PROTAGONISTA DE UN FEMINICIDIO ANUNCIADO / FABIOLA DÍAZ DE LEÓN, ESCUELA DE SEÑORITAS #JuevesDeMasColumnas  @escdesenoritas

NACIONAL

Luis Alberto Harvey Mac Kissack es un egresado del ITAM de la licenciatura en economía en 1985 que tiene 5 hijos, 3 de un primer matrimonio fallido y 2 hijas más del segundo, también fallido. En 2016 se consumó su segundo divorcio.

Siendo un destacado empresario pasó a formar parte del reparto de Shark Tank México en las 3ª y 4ª temporadas (2018 y 2019) época para la cual su divorcio con Virginia Irabién Calderón ya había sido concluido. Poco importan los detalles de sus muchas inversiones y compañías, lo que importa es que, gracias a su poder económico, ha podido seguir violentando, no sólo a su ex esposa Virginia, sino a sus dos hijas (una de las cuales está enferma y es el receptáculo de la ira paterna).

En entrevista con Pamela Cerdeira Pamela Cerdeira en Twitter: “#Exclusiva🚨 | «Jamás imaginé que sacaría una pistola y me la pusiera en la cabeza» Virginia Irabien, ex pareja del panelista de #SharktankMx🦈, Luis Harvey (@luisharveym), denuncia en #PamelaEnMVS👩🏼🎙 la violencia que vivió en manos del empresario. https://t.co/okKOCn47I2” / Twitter o entrar directamente a la nota con el audio de Virginia relatando los hechos en El tiburón que atacó a su propia familia – Pamela Cerdeira (pamcerdeira.com)

Resulta que a partir de haber despertado la ira del “tiburón” no sólo ha abierto una demanda contra Virginia en la que exige una sentencia de 16 años de cárcel por “fraude procesal” y ha demandado al juez que llevó su divorcio. Un claro ejemplo de querer invertir dinero en fastidiar a todos los supuestos causantes de su desgracia. Un caso más donde el poder del macho rechazado y económicamente dominante puede y ejerce una violencia tras otra en total impunidad sin que las autoridades cobijen a las víctimas. Virginia ha solicitado una entrevista con la fiscal capitalina, Ernestina Godoy, en repetidas ocasiones y simplemente no hay respuesta a su petición.

La cuestión es que México ha cambiado y los lemas de la batalla y la furia mexicana, el feminismo, son “si tocan a una respondemos todas” y no vamos a dejar a Virginia sola. La cloaca fue abierta, estamos ante una mujer sola, madre de familia, que ha sido encañonada por su ex marido alcoholizado el pasado 8 de marzo de 2020, sí, el 8M anterior al famoso paro del 9M de 2020, a días del confinamiento por la pandemia y que dicho confinamiento ha exacerbado la violencia contra las hijas por parte del padre y contra Virginia.

#VirginiaNoEstaSola y si las autoridades vendidas: jueces, ministerios públicos, agentes de la policía y la misma fiscal no responden la fuerza de las mujeres sí lo exigirá en las calles, en las redes, en las paredes y en todos los sitios (virtuales y no) que lo requieran para que no tengamos una crónica de un feminicidio anunciado, como bien pudo haber sucedido con jalar el gatillo el 8M de 2020.

Ni cárcel ni desamparo para Virginia Irabién Calderón, todo lo contrario, si las autoridades no responden, responderemos las mujeres y empezando por exigirle a la jefa de gobierno capitalina que tome el asunto en sus manos y vea qué es lo que está pasando con este caso, y con miles más. ¿Hasta cuándo la CDMX va a seguir permitiendo que las mujeres, las infancias y las juventudes sean violentadas por machos borrachos que se sienten dios intocable por el peso de sus chequeras o su privilegio de género? #NiUnaMas

 

No permitiremos un atropello más porque si bien las autoridades vendidas pueden hacer mucho daño, la respuesta de la voz del feminismo y la opinión pública puede todavía causarle más daño a Luis Alberto Harvey Mac Kissack empezando por hacer públicos sus intereses empresariales y llamar a un boicot a sus hoteles y empresas que no sólo se llevaría entre las patas a él sino a todos los socios. Que rompan el pacto patriarcal y obliguen, a cambio de seguir ganando dinero que es lo único que les importa, a Luis Alberto Harvey Mac Kissack a desistir de su demanda absurda, a cumplir con sus obligaciones de manutención y pensiones y a refrenar su mala costumbre de violentar a su ex esposa o a cualquier otra mujer que se encuentre a su alcance.

Esta es una primera llamada a boicotear a una de las firmas empresariales más importantes del país porque los machos violentadores y posibles feminicidas, se van a tener que contener y educar, aunque sea a punta de periodicazos y baños de glitter violeta por dónde sea que den la cara. El secreto se ha roto, ahora la voz de Virginia es la de todas, si algo le pasa, el único responsable será Luis Alberto Harvey en contubernio con un Estado Cómplice.