#MartesDeColumnas “LAS CUENTAS INDIVIDUALES DEL SAR, SON PROPIEDAD DE LOS MEXICANOS” @VRubioMarquez en @elheraldo_mx

NACIONAL, POLÍTICA

Pareciera obvio este título, pero no lo es. Antes de las reformas de 1997 y de 2007 (la primera para los cotizantes al IMSS y la segunda para los cotizantes al ISSSTE), el Estado se encargaba de pagar las pensiones de todos los mexicanos (sistema de reparto). Las reformas fueron indispensables para darle sostenibilidad a nuestros principales sistemas pensionarios y solvencia a nuestras finanzas públicas. Para darnos una idea, en los años 70 había 26 trabajadores en activo por cada pensionado y hoy esa proporción es de 2 a 1. Recordemos que los sistemas pensionarios han quebrado a países enteros; ahí tenemos el caso reciente de Grecia.

Hoy existen 10 instituciones financieras (Afore) que administran los ahorros de los trabajadores y son reguladas por la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (Consar) que establece el régimen de inversión al que deberán sujetarse para lograr el propósito fundamental del Sistema, que es maximizar en el tiempo los rendimientos para los trabajadores y que, con ello, la autoridad lo que hace a través de la regulación es “premiar” a las Afore que tienen un mejor desempeño por medio de una valoración de tres factores: comisión, rendimientos y servicio.

El peso de estos tres factores ha cambiado en el tiempo, así como lo ha hecho el régimen de inversión, que ha pretendido los mejores rendimientos por la vía de una variedad de instrumentos nacionales y extranjeros, tanto de renta fija como de renta variable, de corto y de largo plazo, que permitan una adecuada mezcla entre rendimiento y reducida exposición al riesgo. Los rendimientos en los fondos pensionarios se miden en el largo plazo, ya que serán recursos que estarán invertidos 20-50 años, por lo que las variaciones diarias, e incluso mensuales, se compensan por mucho en el tiempo.

El titular de Ejecutivo federal presentó el pasado 23 de enero ante la Cámara de Diputados una modificación a la Ley de los Sistemas de Ahorro para el Retiro, misma que habremos de discutir y votar ahora en el Senado, primero en las comisiones, y posteriormente en el Pleno. Espero una discusión técnica interesante y resultados que nos permitan ponernos de acuerdo para preservar este sistema de cuentas individuales en manos de sus dueños, los trabajadores de México.

Lo último que desearíamos que se derivara de dicha modificación serían dos resultados: 1) una peligrosa consolidación en el sistema (muchas menos Afore) y 2) que se incentive de facto a que proyectos de viabilidad y rendimientos dudosos como el Tren Maya o la Refinería Dos Bocas, sean financiados con los recursos de los trabajadores. Lo que se requiere en este sistema son mayores aportaciones. El régimen de inversión jamás resolverá por sí solo el problema de suficiencia pensionaria en México.

POR VANESSA RUBIO MÁRQUEZ

SENADORA DEL PRI

@VRUBIOMARQUEZ