MEMORANDÚM DEL PRESIDENTE PONE EN RIESGO LA CERTIDUMBRE JURÍDICA DEL PAÍS: DIPUTADO DEL PRD

NACIONAL, POLÍTICA

NOTILEGIS, PALACIO LEGISLATIVO DE SAN LÁZARO, CDMX.- El diputado del PRD, Antonio Ortega Martínez, consideró que el memorándum que el presidente Andrés Manuel López Obrador envió a los secretarios de Gobernación, Hacienda y Educación para buscar la manera de dejar sin efecto la reforma educativa vigente golpea y pone en riesgo la certidumbre jurídica del país ante el mundo para atraer inversiones.

Opinó que esta decisión del Ejecutivo federal “es un momento muy oscuro que presagia que México puede enfrentar serios riesgos, porque se está mostrando que no tenemos piloto; ruta, metas ni objetivos”.

Dijo que con decisiones como esa, “de pasar sobre la Constitución solo por dar certeza a sus aliados de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE)”, el mandatario federal “confirma que no sabe qué hacer con la cantidad enorme de votos que se le depositaron en las urnas”.

De acuerdo con el legislador, López Obrador “está repitiendo una práctica política de la que abusó cuando fue jefe de Gobierno en lo que antes era el Distrito Federal, hizo de los decretazos, de las ordenanzas y de los acuerdos administrativos, un estilo arrebatado, voluntarista de gobernar que puso en crisis a la administración”.

Agregó que lo anterior fue a tal grado que “el actual secretario de Hacienda se vio obligado, entre otras razones, a presentar su separación del cargo en ese entonces como secretario de Finanzas”. Es preocupante, dijo el perredista, que a estas alturas de su carrera política, el presidente López Obrador no logre diferenciar la existencia del Estado con sus equilibrios de poder, y la distribución de facultades y del poder mismo, entre el Ejecutivo, el Legislativo y el Judicial.

En este sentido Ortega Martínez consideró que el mandatario federal no tuvo asesoría en esta decisión: “El Presidente escribió y redactó, en la soledad de su oficina en Palacio Nacional, porque no creo que lo haya hecho en consulta con otros funcionarios. Ellos, por muy bajo perfil o el nivel que tengan, conocen los alcances básicos que tiene la distribución de poderes en México”.

En su opinión, el gabinete del presidente se comporta más como “ayudantía”, que como funcionarios que tienen responsabilidades jurídicas y políticas. “El comportamiento de ellos, de atender órdenes y comportarse como ayudantía, de poco le sirve al presidente; pero mucho menos al país”.

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