NI GUERRA COMERCIAL, NI TERCER PAÍS SEGURO
Ciudad de México.- Ante el anuncio realizado por el gobierno estadounidense, el Diputado Alfonso Ramírez Cuéllar, Presidente de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública de la Cámara de Diputados manifestó que la imposición de aranceles a productos mexicanos impactaría negativamente en las economías de ambos países, pues, además de afectar al sector industrial mexicano, la medida repercutiría en los consumidores estadounidenses, quienes absorberían el incremento de los precios.
“Una ofensiva arancelaria no es conveniente para nadie. Sería violatoria del Tratado de Libre Comercio, aún vigente, y de otras normas de comercio internacional, por lo que se deberá analizar la conveniencia de acudir ante tribunales o paneles internacionales”, afirmó. Sin embargo, en caso de que el gobierno de Estados Unidos imponga la medida, México podría actuar de manera similar: “Ante la violación de los acuerdos comerciales, el Derecho Internacional facultaría automáticamente a México a aplicar medidas compensatorias”.
El Diputado Ramírez Cuéllar señaló que las eventuales medidas tomadas por el gobierno mexicano impactaríanprincipalmente a los estados agrícolas de Estados Unidos y a los productores de combustibles, toda vez que son los que más exportan a México. Asimismo, consideró conveniente la aplicación del mecanismo denominado “carrusel”, que consiste en rotar los productos a los cuales se les aplica una represalia. Al elevar la incertidumbre en el sector exportador afectado, se incrementa la presión para el retiro de los aranceles.
México podría actuar sobre los siguientes productos, los cuales representan un mayor monto en importaciones provenientes de Estados Unidos y por lo tanto serían los más afectados por la aplicación de un arancel[1]:
1. Gas natural. Valor de las importaciones: 5,080.9 millones de dólares (mdd).
2. Maíz amarillo. Valor de las importaciones: 2,726.7 mdd.
3. Mercancías para el ensamble o fabricación de aeronaves o aeropartes. Valor de las importaciones: 1,678.8 mdd.
4. Turbosina y sus mezclas. Valor de las importaciones: 1,656.1 mdd.
5. Propano. Valor de las importaciones: 1,610.8 mdd.
Por otro lado, las empresas instaladas en México (muchas de ellas de origen estadounidense) podrían ver afectada sus operaciones, pues no todas tendrían la capacidad para absorber los costos extras de exportación.
El anuncio de Donald Trump afectaría regiones mexicanas con alto dinamismo económico, conforme a los bienes producidos:
1. Vehículos. Valor de las exportaciones: 22.5 mdd. Los principales estados productores son Nuevo León, Aguascalientes, Guanajuato, San Luis Potosí, Coahuila, Sonora, Estado de México y Puebla. En este sector, el aumento de los aranceles puede ser catastrófico, pues tiene un apretado margen de utilidad.
2. Computadoras. Valor de las exportaciones: 15.7 mdd. Principales estados productores: Chihuahua, Sonora, Baja California, Tamaulipas y Estado de México.
3. Aceite de petróleo. Valor de las exportaciones: 9.3 mdd. Principales estados productores de petróleo: Tabasco, Veracruz y Chiapas.
4. Pantallas planas. Valor de las exportaciones: 7.5 mdd. Destaca la ciudad de Tijuana conocida como la “meca de las televisiones”, que alberga a marcas como Samsung y Sony. Cabe destacar que la industria electrónica, en general, sería una de las más afectadas por las medidas arancelarias de Trump. Las firmas surcoreanas que fabrican televisiones y electrodomésticos en México, para luego venderlas en Estados Unidos, son las más vulnerables. La mayoría de las televisiones y un tercio de los frigoríficos tienen como destino ese país.
5. Autopartes. Valor de las exportaciones: 6.8 mdd. Principales estados productores: Aguascalientes, Guanajuato, Puebla y Chihuahua.
El Presidente de la Comisión de Presupuesto manifestó que se busca evitar un escenario de volatilidad e incertidumbre financiera y una disminución en las exportaciones a dicho país, lo que finalmente se traduciría en una caída del PIB, del consumo privado y de la recaudación tributaria.
Además, “un problema estructural, como lo es la migración de personas indocumentadas a Estados Unidos, no se va a resolver con este tipo de medidas, que resultarían contraproducentes para el objetivo del presidente Trump, pues al afectar las finanzas públicas mexicanas, se destinarían menos recursos a la regulación de los flujos migratorios”. Por el contrario, “se requiere atacar el origen del problema, que en este caso es la situación de inseguridad y pobreza en que se encuentran sumidos los países de Centroamérica”.
Ramírez Cuéllar recordó que el gobierno de México, con la colaboración de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), se encuentra promoviendo un Plan Integral de Desarrollo, que pretende impulsar el desarrollo económico de Guatemala, Honduras y El Salvador para atenuar las causas estructurales que detonan los flujos migratorios.
