PARA CERRAR CON BROCHE DE ORO #MartesDeColumnas @MARTHAGTZ MUJERES Y EL 10 DE MARZO

Nadie culpa al Presidente de lo que ocurre hoy, pero su actitud ha detonado rabia. Ante esto, un día después del 9 de marzo se vuelve fundamental para el movimiento feminista

Pocos temas han tomado tanta relevancia y unidad entre la población como la marcha feminista del 8 de marzo y el paro nacional #el9nadiesemueve. Aunque estamos concentrados en el movimiento, es indispensable en este camino preguntarnos: ¿cuál va a ser el resultado el día 10 de marzo? ¿En qué terminará el movimiento?

De manera natural por ser autoridad y el primer encargado de organizar y atender las demandas de la sociedad, el gobierno debe dar respuesta. Sin embargo, en esta ocasión ha enviado de manera vergonzosa y sistemática los peores mensajes que autoridad alguna pueda expresar para resolver cualquier tema: Primero, trató de negar y minimizar los feminicidios de Ingrid y la pequeña Fátima que a sus escasos siete años desafortunadamente es parte de las 10 niñas y mujeres que diariamente son asesinadas en nuestro país, en un afán absurdo de imponer en la agenda pública la indefendible, enredada y nada transparente venta y rifa del avión presidencial.

Segundo, desviar la atención, en lugar de manifestarse indignado por el homicidio de otra pequeña, se limitó a criticar las pintas en paredes y puertas de Palacio Nacional.

Tercero, confrontación disfrazada de empatía, argumentando libertad de expresión cuándo públicamente Beatriz Gutiérrez Müller se une al movimiento en redes sociales, para horas después autocensurarse y publicar que no era lo correcto. Por si fuera poco, utiliza (y se dejaron utilizar) ocho secretarias de Estado para dar una conferencia de prensa calificándolo como el primer feminista del país, argumentando paridad, cuando el reclamo de millones de mujeres es de justicia ante la impunidad y el creciente número de feminicidios.

Nadie culpa al Presidente de la República de lo que ocurre actualmente, pero su actitud ha sido un elemento detonador de rabia, y acumulación de esfuerzos para hacerle entender que no es una cuestión (personal) de su cargo.

Sus expresiones, han sido uno de los elementos para echar más gasolina al fuego existente, hoy se puede advertir que el movimiento no sólo rebasó a los gobernantes, específicamente a AMLO, sino que su capacidad de respuesta ha sido absurda irresponsable y francamente ridícula. Ante eso, el 10 de marzo se vuelve un asunto fundamental para el movimiento feminista.

Esto es así, ya que el propio movimiento contiene diversos, múltiples y complejos problemas: violencia, feminicidios, libertad de expresión, equidad, igualdad salarial, cancelación de programas, entre otros. Todos  confluyendo en dos días, a la misma hora y en el mismo lugar, y todos merecen atención y respuesta. De no ser así la movilización se puede desbordar en lo que resta de esta administración, y ahora sí observaremos a un movimiento que dependiendo su organización pondrá en riesgo la permanencia del gobierno.

Existe respuesta, depende de capacidad y eficacia en la solución de problemas.

¿Dimensionará el movimiento y lo que está en juego este gobierno?

POR MARTHA GUTIÉRREZ

ANALISTA EN COMUNICACIÓN POLÍTICA

@MARTHAGTZ