PARA CONTAR/ ¿DIÁLOGO DELGADO-MUÑOZ LEDO? #MartesDeColumnas @zarateaz1

COLUMNA, NACIONAL, POLÍTICA

Pasó el trago amargo de la elección del nuevo dirigente de Morena. Proceso complejo e impregnado de dimes y diretes en todos los tonos, acusaciones entre unos y otros. Hubo necesidad de resolver la competencia interna a través de encuesta.
Ahora viene lo más difícil, recomponer el partido, concertar y dialogar con los diversos grupos internos o corrientes, formar el frente deseado para las elecciones del próximo año. Ponerse de acuerdo en la nominación de candidatos. Objetivo y misión del diputado Mario Delgado Carrillo.
Por lo pronto ha dado el primer paso, botón de muestra de su habilidad negociadora, conseguir en armonía el relevo en la coordinación de los diputados federales de su partido. Aceptaron sin pleitos ni reproches a Ignacio Mier. Ninguno de los aspirantes objetó la decisión. Dolores Padierna y Sergio Gutiérrez Luna quedaron conformes. Nadie protestó
Conciliar dentro de Morena, por lo que se ha visto, tiene alto grado de dificultad. Yeidckol Polevnsky no lo pudo conseguir. Tampoco Alfonso Ramírez Cuéllar. La consulta electiva los dividió más, hubo descalificaciones bajas, invenciones ofensivas y personales.
Se ve contracorriente limar asperezas. Tarea en la que Mario Delgado deberá ocuparse en primer lugar si quiere formar equipo compacto para el año electoral que se avecina. Podría equivocarse si cree ahora, una vez instalado en la presidencia de su partido, que sus adversarios tendrían que hacerle reverencia, simplemente porque es el nuevo líder.
Ninguno de sus contendientes lo buscaría con ese propósito; tampoco estarían cerrados al diálogo. Saben lo que está en juego en el 2021: 15 gubernaturas y la renovación de la Cámara de Diputados, principalmente. Peleados, correrían el riesgo de perder la mayoría legislativa.
¿Se podrá sentar Mario Delgado con Porfirio Muñoz Ledo, después de lo que se dijeron durante la competencia interna?
A veces pareciera que Porfirio es intransigente, que no va a ceder en nada, pero su misma trayectoria demuestra que entiende y digiere la política. Nunca ha sido radical y tiene claro que no siempre se gana. Hay prioridades y las acepta. Se ha vuelto autocrítico y la autocrítica puede ser útil a Morena, para mejorar, encauzada, sin dividir.
Por cortesía, en aras de sumar, no sería la primera vez que un dirigente decidiera buscar a sus compañeros. Me ha tocado ver a personajes que van hasta la oficina de quienes fueron sus adversarios.
Además, en este caso, sui géneris, Mario Delgado llegó a la presidencia de Morena mediante encuesta, no con el voto directo de militantes o simpatizantes. Así que, necesita ganarse a sus compañeros, incluso a sus competidores en la elección interna.
vite10@hormail.com
@zarateaz1
arturozarate.com