POLÍTICA EXTERIOR MULTILATERAL CON IGUALDAD DE GÉNERO, INCLUSIVA Y DEMOCRÁTICA

NACIONAL, POLÍTICA, SRE

CIUDAD DE MÉXICO.- La política progresista con visión feminista de la Secretaría de Relaciones Exteriores impulsa la construcción de una sociedad nueva, justa y libre que además tenga una perspectiva humana.

Por ello, la presidenta de la 73ª Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), María Fernanda Espinosa, la subsecretaria para Asuntos Multilaterales y Derechos Humanos, Martha Delgado, así como la titular de Inmujeres, Nadine Gasman, se reunieron con mujeres líderes de diversos ámbitos.

En la reunión, la subsecretaria Delgado reconoció que la visita de Espinosa Garcés significa una oportunidad para llevar la agenda mexicana de género a la política exterior multilateral para “retroalimentar e inspirar no solo la vida de las mujeres y niñas de México, sino también compartir las mejores prácticas con la máxima representante del principal foro de la ONU, por su carácter universal y democrático”.

Como parte de la política exterior multilateral, dijo la subsecretaria Delgado, desde la Secretaría de Relaciones Exteriores se busca llevar hasta lo local las soluciones globales y viceversa.

El énfasis está en las políticas que puedan tener un impacto tangible en favor de la igualdad de género y la no discriminación. “Para ello, nos hemos propuesto esta alta prioridad como uno de los cinco ejes de acción de una nueva política exterior transformadora” dijo.

En especial se trabajará para garantizar los derechos de quienes pertenecen a grupos en situación de vulnerabilidad, impulsando iniciativas a favor de las mujeres y niñas indígenas, en situación de pobreza, y aquellas que viven con discapacidad, por nombrar algunas, así como promover una cooperación internacional para el desarrollo con perspectiva de género.

Martha Delgado dijo que de manera paralela se tiene el compromiso de empoderar a las mujeres del Servicio Exterior Mexicano y a las que laboran en la Secretaría de Relaciones Exteriores para lograr una auténtica política exterior feminista, cuyos resultados permeen a nivel nacional y en los tres órdenes de gobierno.

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