PRODUCEN COMBUSTIBLE A PARTIR DE UNA SEMILLA
CIUDAD DE MÉXICO.- La Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (SAGARPA), a través del Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP), desarrolló una investigación para conocer los distintos componentes tecnológicos que promueven el uso de la semilla de moringa como insumo para la producción de biocombustibles.
La investigación del INIFAP concluyó que la moringa oleífera es una de las especies con mayor capacidad para este propósito, por su adaptación a diversos ambientes, así como su alta calidad de aceite.
Esta planta, originaria del sur del Himalaya y noroeste de la India, es adaptable a distintos ambientes, incluso en condiciones de aridez elevada; es un árbol perenne de crecimiento rápido, puede llegar a vivir hasta 20 años y aporta distintos nutrientes al suelo en el que crece.
El investigador del INIFAP, Jorge Alberto Basulto Graniel, explicó que desde el año 2011 se trabajó con la semilla de la moringa oleífera como nueva especie productora de aceite para la elaboración de biodiesel.
En este caso, los proyectos en los que colaboró se refieren al mejoramiento de insumos agropecuarios para la producción de biocombustibles, así como la investigación y desarrollo de producción de moringa para la obtención de biodiesel en México.
Con estas investigaciones se conocieron los componentes tecnológicos necesarios para un adecuado cultivo de moringa, con el objetivo de producir semilla, así como los requerimientos ambientales, el manejo y mantenimiento de la plantación, y el control de maleza y fertilización, aseguró.
El especialista del INIFAP destacó las buenas características fisicoquímicas de esta planta, entre ellas la estabilidad de oxidación y resistencia a la rancidez que es superior a otros aceites, como el de soya, girasol y aún el aceite de oliva.
Además, debido a su poca presencia de ácidos grasos insaturados se puede obtener una buena calidad de aceite para la producción de biocombustibles.
Una de las principales ventajas de los biocombustibles es su capacidad de ser renovables, pero en el caso de la moringa se trata de un árbol “multipropósito” por ser comestible y con altas cantidades de proteína, calcio, hierro, fósforo y potasio; vitamina A y C; además de aminoácidos y antioxidantes.
Por lo anterior, esta especie puede ser utilizada como complemento en la alimentación y combatir la desnutrición en zonas rurales del país.