SE DESCHONGA LA 4T EN DONCELES #MartesDeColumnas @adrianrueda EN @Excelsior
Hasta Chucho Sesma, líder de la Jucopo, se ha visto fuera de sus casillas, reprendiendo a funcionarios del Congreso.
La disputa interna de la 4T en Donceles está a todo lo que da, pues Martha Ávila y Xóchitl Bravo se han dado hasta con la cubeta por la lana y el poder, mientras que sus rémoras de otros partidos temen quedarse fuera de los mejores huesos.
Parece que Martha no supera que le hayan quitado la coordinación de la bancada, y con ello el control político y económico que durante dos legislaturas tuvo en el Congreso de la Ciudad de México.
Ya son varias las ocasiones que le mete el pie a Xóchitl para dificultarle la operación, como ocurrió en el retraso de la discusión de la reforma judicial, enviada por el Senado de la República, que impidió a la capital ser el primer Congreso local en apoyarla.
Aunque la mayoría concuerda en que el jueves pasado, día en que se discutió y aprobó tal decreto, a Ávila se le fue la sesión de las manos por falta de pericia y a nadie pasó desapercibido el intercambio de puyas entre las dos diputadas oficialistas.
Esta disputa ha frenado la integración de las comisiones legislativas, que permanecen indefinidas a unas horas de que Martí Batres presente el que todos esperan que sea su último informe como gobierno sustituto, pues ya lleva como cinco en dos años.
De hecho, ayer por la mañana se reunió con la fracción oficialista para tratar de destrabar el tema, pues el funcionario no quiere alguna escenita delante de sus invitados, cuando él esté hoy en la tribuna del recinto legislativo.
Por ello, la Junta de Coordinación Política programó una sesión mañanera, previo al informe, a fin de conciliar –ya no con la oposición, que por supuesto tiene su corazoncito puesto en algunas comisiones–, sino entre la propia 4T.
El verdadero atorón morenista está con sus aliados, pues no quieren dejar pasar a algunos diputados por no ser auténticamente guindas, pero que se sienten con los méritos para presidir alguna comisión decente.
Los sombrerazos están a tope, pues hasta Chucho Sesma, líder de la Jucopo, se ha visto fuera de sus casillas, reprendiendo a funcionarios del Congreso.
A todo ello hay que agregar las presiones del propio Martí, quien al parecer no digiere que se va, pues exige a sus diputados que armen la glosa de su informe con los secretarios en funciones, como si a alguien le importara.
No acepta que no será más el muñeco del pastel, y que lo verdaderamente importante es lo que ocurrirá a partir del 5 de octubre, día en que tome posesión Clara Brugada. Además, el Congreso debe alistar ya la toma de protesta de los 16 alcaldes de la ciudad.
Pero lo peor de estas broncas internas entre morenistas es que se pueden llevar entre las patas a perfiles frescos de su fracción, como Emilio Guijosa y Pedro Haces, por ejemplo, jóvenes abogados con amplia influencia en La Magdalena Contreras y Tlalpan.
CENTAVITOS…
El que se voló la barda en los festejos del 15 de septiembre fue el alcalde sustituto de Venustiano Carranza, Adolfo Hernández García, quien aprovechó el evento para festejar los 15 años de su hija y los 18 de su hijo, contratando artistas como Yandel, supuestamente para deleite del pueblo reunido en la explanada. Aunque en realidad fue para deleite de sus hijos y chavos invitados, que estuvieron en el área VIP del edificio de Gobierno disfrutando en privado de la fiesta. Sin embargo, no fue sólo la música y los mariachis, sino la comida y el bar pagado por la ciudadanía. Qué alcalde tan pichicato, dirían las abuelas, y eso que nadie lo eligió, sino que llegó como interino de Evelyn Parra.