¡SOLO 50% DE LOS MEXICANOS CREE QUE LA DEMOCRACIA ES LA MEJOR FORMA DE GOBIERNO! #MartesDeColumnas @VRubioMarquez en @elheraldo_mx
El Instituto Internacional para la Democracia y Asistencia Electoral (IDEA) publicó la nueva versión del estudio “El Estado de la Democracia en el Mundo y las Américas”, cuyo objetivo es tomarle pulso a la salud de la democracia en el mundo, identificando tendencias y retos.
La edición del mes pasado evalúa la calidad de la democracia conforme a 5 atributos en una escala donde el 0 representa el desempeño más bajo y 1 el más alto: 1) gobierno representativo, 2) derechos fundamentales, 3) control del gobierno, 4) administración imparcial, y 5) participación.
Los resultados de este ejercicio señalan que países que transitaron a la democracia desde los años 70, como Brasil, Argentina, Perú y Uruguay, alcanzaron los índices más altos de la clasificación, todos con resultados superiores a 0.60; mientras que México se ubica con 0.58 a la mitad de la tabla, junto con Colombia (0.51), Bolivia (0.55) y Ecuador (0.59).
Por su parte, en su reporte 2018, Latinobarómetro preguntó a ciudadanos de diversos países de la región latinoamericana lo siguiente: “Está usted de acuerdo con que la democracia puede tener sus problemas, pero aun así es el mejor sistema de gobierno”. Increíblemente, en México sólo 55% de los encuestados contestó que la democracia es el mejor sistema de gobierno. Y además, nuestro país se encuentra alejadísimo de priorizarla a diferencia de Colombia con (81%), Uruguay (78%), Costa Rica (77%), Venezuela (73%) y Paraguay (73%).
Definiciones de democracia hay muchas, pero la mayoría incluye la existencia del voto libre y secreto; autoridades y tribunales electorales creíbles y autónomos; libertad de asociación; prensa libre; protección de los derechos humanos, entre otros. El que los mexicanos le den tan poca relevancia a la democracia, explica el poco enojo, la poca reacción y la pasividad de muchos sectores de la sociedad ante las medidas contrarias a la democracia, que se han tomado en el último año.
Entre ellas: la contrarreforma educativa aprobada en septiembre, que desapareció uno de los 10 organismos autónomos del país; el Instituto Nacional para la Evaluación Educativa, cuyo objetivo era evaluar la calidad, desempeño y resultados del sistema educativo de preescolar, primaria, secundaria y media superior.
Otro elemento fue ampliar el catálogo de delitos que ameritan prisión preventiva, lo que aumenta los márgenes de discrecionalidad en la impartición de justicia y aplica el principio de presunción de culpabilidad antes de la presunción de inocencia.
Y qué decir de los ataques a la libertad de expresión de medios, sociedad y oposición. Ante una depreciación del valor de la democracia por parte de la población (porque ésta indiscutiblemente ha fallado en resultados y las nuevas generaciones poco saben de vivir sin ella), resulta claro que no todos están dispuestos a dar la batalla para defenderla. Así las cosas.
POR VANESSA RUBIO
SENADORA DEL PRI
@VRUBIOMARQUEZ
