VANESSA RUBIO / ERROR, PENSAR QUE LOS SERVIDORES PÚBLICOS SON EL MAL DEL PAÍS #Sabadeando @VRubioMarquez @elheraldo_mx
¿Justicia social? ¿Justicia política? ¿Combate a la corrupción? ¿Fin de los abusos? Todo ello es indispensable para concretar los cambios profundos que los ciudadanos exigen con justa razón. Pero nada justifica que se pretendan alcanzar por la vía de la violencia ni asestando golpes infundados en contra de todo lo que se parezca al servicio público. Es lamentable que, porque alguien ostente un cargo público, lo satanicen a priori como corrupto y denuesten sus bienes, su vestir, su comer, su vida entera. Encontremos culpables donde los hay, pero no sigamos dividiendo a la sociedad mexicana.
La transformación que necesita nuestro país no es de división, sino de unión, de diálogo, de encuentro de espacios comunes para trabajar juntos. Diferencias, las habrá, pero hay que dirimirlas en democracia y en civilidad.
Vuelvo a insistir: requerimos hilvanar al México roto que resultó producto de los enconos electorales que se acidificaron en las redes sociales.
Un México lleno de rencores y odios no nos va a llevar a ningún lado. Menos aún, un México que fomenta y que tolera violencia y el juicio infundado.
Si un servidor público no vive de acuerdo con sus legítimos ingresos, que lo investiguen y se proceda legalmente.
Si hemos acordado un nuevo esquema de austeridad, ejecutémoslo. Pero hagamos las cosas bien, de manera inteligente. Los aspavientos populistas meramente mediáticos alimentan a los inconformes, pero no resuelven el fondo.
¿Ha habido malos servidores públicos? Sin duda. Todos aquellos que no puedan justificar lo que tienen (cuentas bancarias, bienes o un estilo de vida por encima de sus ingresos), que se les audite y se les aplique la ley.
Pero los miles de servidores públicos honestos no nos tenemos por qué sentir apenados o inseguros; o peor aún, no tenemos que aceptar el juicio sin sustento o la violencia.
Muchos de los que hoy se llenan la boca con discursos grandilocuentes en materia de austeridad y lanzan propuestas absurdas, fueron servidores públicos/legisladores antes y no los vimos denunciar -y menos, regresar- sus salarios y prestaciones.
¿No nos gusta la realidad? Cambiémosla y hagamos las cosas bajo nuevos acuerdos y mejores reglas, pero ya no es justo decir que el servicio público es el mal de México. Ésa es una salida fácil y falsa.
El mal servicio público es malo y hay que combatirlo, no se diga la corrupción.
Pero más malo es generalizar, usar la violencia o culpar a miles de mujeres y hombres que cada día buscan dar lo mejor de sí, luchan por sacar su trabajo adelante dignamente y, con ello, construir un mejor país.
Démosles soluciones de fondo a los mexicanos. Hagamos buenas leyes y buenas políticas. Pongámonos a trabajar en lo verdaderamente relevante.
Nuestro país nos necesita a todos. Nuestro país necesita al buen servicio público.
Vanessa Rubio
SENADORA DEL PRI
@VRUBIOMARQUEZ
