UN CHAPUZÓN AL AGUA @MARTHAGTZ #Domingueando en @elheraldo_mx

COLUMNA, NACIONAL, POLÍTICA

Cada vez se vuelve más urgente que las autoridades en las tres esferas de gobierno seriamente se involucren, dejen de lucrar electorera y políticamente, y se destinen mayores recursos para la rehabilitación de la infraestructura

Entramos a la temporada de estiaje y esto significa que millones de ciudadanos en el país la van a pasar mal. Este sentimiento es recurrente y ahora sistemático por el cambio climático —que muchos gobiernos siguen negando o en el mejor de los casos están simulando y otros que hasta a sátira lo toman.

El caso de Samuel García fue ejemplar de cómo publicó en redes sociales mensajes a su juicio muy serio, pero de mofa para quienes le entienden más al asunto cuando empezó a llover en Monterrey después de una severa y muy preocupante crisis En el caso de la Ciudad de México y el Estado de México que comparten la zona metropolitana por excelencia en el país, se advierte un daño muy profundo al prever 24% menos de agua en las presas del sistema Cutzamala y la necesidad de detonar un mecanismo extraordinario para contrarrestar la escasez en las colonias; obviamente esta situación, para no variar, afecta a los que menos tienen.

Se están destinando 600 pipas para atender la demanda y además se convocó a la atención del problema en conjunto con otras autoridades (alcaldes y municipios sin grandes resultados). Mientras se trataba de cómo resolver un problema que atañe a la colectividad varios de los alcaldes exigían reparar tuberías en redes secundarias y ser ellos quienes administren la entrega de las pipas. Es decir, una vez más la politización de las necesidades por encima de las soluciones, porque obviamente quien entregue este recurso convertido en derecho humano tiene la posibilidad de capitalizar políticamente lo que, en términos constitucionales, es su obligación atender.

En los barrios y colonias de estas entidades es más que conocida la manera de manipular llaves de paso, compuertas e incluso movilizaciones con este pretexto. Decir que es un asunto de seguridad nacional es poco eficaz, porque a menos que se dirija una política seria en contra de las compañías que más acumulan este recurso, como Coca Cola o Nestlé, no significa nada este concepto, y además por años se ha reducido el tema a argumentos seriamente muy poco desarrollados.

Incluso, todavía al día de hoy existe en la Cámara de Diputados una legislación, dormida por el cabildeo de estas empresas para evitar poner verdadera atención, darle seriedad y contexto a la necesidad de redistribución y justa proporción. Es más, para variar se ha decidido hasta aumentar el costo a los domicilios de clase media y media alta, que son un número determinado de colonias que tienen ingresos medios, altos y muy altos, si estos exceden el consumo; sin embargo, a la industria no se le ha dado un trato similar.

El caudal que se ha reducido 2.5 metros cúbicos representa una de las mayores oportunidades de Andrés Manuel López Obrador para atender verdaderamente a los que menos tienen y una de las causas más sensibles; no obstante, como en muchos otros temas, el Presidente de la República ha decidido colocarse los lentes de invidente, evadiendo su responsabilidad.

La restauración de los mantos, la preservación de espacios boscosos como en Cuajimalpa, donde el alcalde Adrián Rubalcava ha permitido y hasta alentado la invasión (más preocupado por su negociación para incorporarse a Morena), entre otras, son las causas más importantes que se deben atender, incluyendo la solución de las fugas de agua donde se pierde la mayor cantidad del vital líquido y que los alcaldes tampoco se hacen responsables de ello, prefieren andar en campaña sin dimensionar lo que la atención de temas tan delicados como el abasto de agua deja socialmente.

A la vez, una pésima estructura en las instituciones administradoras de agua de todas las entidades del país, incluyendo Estado de México y la capital del país, cuyos operadores en tierra se han dedicado a vender y corromperse hasta ser inconfiables por la misma institución, pero inamovibles por lo sensible de la operación hacen que el tema se pretenda invisibilidad aún más.

Cada vez se vuelve más urgente que las autoridades en las tres esferas de gobierno seriamente se involucren, dejen de lucrar electorera y políticamente, y se destinen mayores recursos para la rehabilitación de la infraestructura, el saneamiento, el riego, y la realización de nuevos proyectos de fuentes alternas de abastecimiento, antes de que el destino nos alcance, porque sin duda la sequía es el verdadero adversario.

Y no es pregunta.

MARTHA GUTIÉRREZ

COLABORADORA

@MarthaGtz